Florimell: Una mujer que representa la castidad
Florimell es un personaje que aparece por primera vez en el libro 3 de La Reina de las Hadas de Edmund Spenser. Es una mujer que representa la castidad, pero de una manera diferente a otras.
Florimell y la castidad
Existen muchos personajes que representan la castidad en La Reina de las Hadas, como Britomart, Belphoebe, Amoret y Malecasta. Sin embargo, Florimell es diferente porque huye de todos los hombres que desean imponerse sobre ella. De hecho, pasa la mayor parte del libro 3 huyendo de todo y de todos, incluso de aquellos que no le desean ningún daño, como Arturo y Timias.
Las aventuras de Florimell
Después de huir del cazador, finalmente se queda con una bruja y su hijo, pero también huye de ellos. Para buscar a Florimell para su hijo, la bruja crea un enorme monstruo y lo envía tras ella. Florimell apenas escapa saltando a un barco de pesca, piloteado por un anciano.
Lamentablemente, ese anciano no es un buen anciano, porque intenta imponerse sobre ella. Es rescatada aparentemente por un espíritu del agua conocido como Proteus. Pero cuando Proteus la lleva de vuelta a su guarida en una cueva marina gigante, él también se enamora de ella e intenta ganarse su corazón.
Cuando ella se niega, él se enfada y también intenta imponerse sobre ella. Entonces queda cautiva durante varios meses.
El amor de Florimell
Aunque Florimell pasa la mayor parte de su tiempo huyendo de los hombres, en realidad hay un hombre al que ama, un caballero conocido como Marinell. Lamentablemente para Florimell, Marinell está decidido a mantenerse alejado de todas las mujeres, hasta que no lo hace.
Dado que tanto Florimell como Marinell se esfuerzan por alejarse de la compañía de los demás, al final resulta ser una buena combinación.
La falsa Florimell
Durante el libro 3, la bruja mencionada anteriormente acaba creando una falsa Florimell (un duplicado exacto de Florimell) para su hijo. Pero su hijo no puede disfrutar de esta falsa Florimell por mucho tiempo, porque es rápidamente recogida por Braggadochio, y luego por otro caballero.
En realidad, pasamos más tiempo con la falsa Florimell que con la verdadera, ya que ella es el punto central de un gran torneo en el libro 4. Durante ese torneo, se la ofrece como premio para quien gane, y pasa de caballero en caballero, teniendo relaciones con muchos de ellos. A diferencia de la verdadera Florimell, esta falsa copia es todo lo contrario a la castidad.