Lucifera: La encarnación del orgullo en The Faerie Queene

Lucifera, la reina del orgullo:

En el libro 1 de The Faerie Queene, Lucifera es una de las principales villanas. Aparece brevemente durante el episodio de la Casa del Orgullo, cuando el caballero Redcrosse está temporalmente bajo el hechizo de Duessa.

Su nombre sugiere una estrecha relación con el diablo (también conocido como Lucifer). Lucifera personifica el orgullo, uno de los siete pecados capitales. No es de extrañar que esté rodeada por los otros seis pecados mortales, cada uno representado por una figura diferente con atuendos que recuerdan el pecado que encarnan.

Lucifera se sienta en un alto trono rodeada de personas que desean el mismo estatus que ella. Tiene un gran ego y piensa mucho en sí misma. Además de los seis pecados capitales, la acompañan dos individuos conocidos como Vanidad y Ambición.

El contraste entre Lucifera y otros personajes:

Al igual que Duessa, Lucifera es una antítesis de Gloriana, la Reina de las Hadas, ya que representa lo opuesto a todo lo que Gloriana (que representa a la Reina Isabel I) se supone que encarna.

También muestra un marcado contraste con los personajes de Celia y Alma, que se encuentran más adelante en The Faerie Queene y que también tienen grandes casas que comienzan con "Casa de...". Su morada, la Casa del Orgullo, no es un lugar agradable.

Lucifera es un personaje fascinante que representa el orgullo y el egoísmo. Es una poderosa adversaria para el caballero Redcrosse y un recordatorio de los peligros del pecado.