Tethys: La diosa griega de las aguas dulces
Origen y carácter de Tethys
Tethys, la diosa griega de las aguas dulces, era una de las doce titanes de la primera generación. Nacida de Urano y Gea, las personificaciones del cielo y la tierra, respectivamente, encarnaba un concepto natural fundamental: el agua dulce. Esta personificación era particularmente adecuada, ya que sin agua, la vida terrestre no puede florecer, y promover el crecimiento y la vida se asocia tradicionalmente con figuras femeninas.
Aunque no hay mucha descripción directa de Tethys en la literatura clásica, aparece en referencias en la literatura griega y como figura en el arte del mosaico romano. Lo que se revela de su carácter en tales obras, sin embargo, es en gran medida enriquecedor y está ligado al mundo natural. En ese sentido, Tethys es una figura benigna, a diferencia de muchos de los titanes más conocidos del mito clásico.
Hechos notables de Tethys
Tethys es importante como esposa de Océano, la personificación del agua salada. Con él, dio a luz a las ninfas del océano, las Oceánidas, así como a tres mil espíritus fluviales, los Potamoi. De hecho, los Potamoi son a menudo figuras importantes, incluidas las personificaciones de ríos como el Nilo y el legendario Estigia. Sin embargo, no siempre aparece junto a Océano. En los baños romanos, en particular, aparece sola, lo cual tiene sentido, ya que los baños eran típicamente características de agua dulce.
También es importante como madre adoptiva de Hera, la reina del panteón griego, que es otra asociación apta. Hera es, entre otras cosas, diosa del parto, y el agua pesa mucho en el parto.
Es en su calidad de madre adoptiva de Hera que Tethys recibe más atención directa en la literatura clásica. En un pasaje de la Ilíada de Homero, Hera afirma que se va a visitar a Tethys para encubrir su visita real a Afrodita para entrenarse en las habilidades particulares de esta última. Llamar a una vieja cuidadora no ocasiona ningún comentario o investigación, y Tethys resulta ser un facilitador pasivo del engaño, al igual que incluso las aguas dulces tienen profundidades ocultas y pueden permitir que las cosas se muevan en secreto.
También es en su calidad de madre adoptiva de Hera que Tethys está involucrada en el mito que rodea la constelación de la Osa Mayor. La historia sostiene que la Osa Mayor fue la forma final de la ninfa Calisto, a quien Zeus, el marido de Hera, había tomado como amante y colocado en las estrellas como memorial. Tethys, preocupada por su hija adoptiva, se negó a aceptar a Calisto, negándole el descanso en el océano que reciben otras constelaciones, que cruzan el horizonte.
Referencias principales
Tethys continúa apareciendo en contextos fuera del clásico. Por un lado, le da su nombre a una de las principales lunas de Saturno. Curiosamente, la luna en cuestión está compuesta de agua y hielo. Varias mediciones que se han tomado de la luna sugieren que está compuesta en gran parte de agua dulce, lo que hace que el nombre sea afortunado.
Tethys también da su nombre a un océano primordial, el Océano de Tethys o Mar de Tethys. Los registros geológicos sugieren que era un agua ecuatorial al oeste de los supercontinentes Laurasia y Gondwana. Esos mismos registros sugieren que el antiguo mar de Aral y el mar Caspio, ambos mares de agua dulce, son restos del Tethys. Incluso en geología, entonces, Tethys es el padre de cuerpos de agua dulce, un legado que ha perdurado de hecho más de lo que ha existido cualquier concepto real de la diosa.