Zeus y Hera: dioses olímpicos y sus hijos

Los hijos de Zeus y Hera

Zeus y Hera, dos de los dioses olímpicos más famosos, son también los padres de algunos de los dioses y diosas más conocidos de la mitología griega. En este artículo, haremos un recorrido completo por sus hijos, incluyendo quiénes son, qué hacen y dónde se sitúan en la jerarquía olímpica.

Zeus y Hera tuvieron tres hijos: Ares, Hebe y Hefesto.

Ares

Ares era el hijo de Zeus y Hera. Era el dios de la guerra, la violencia y el derramamiento de sangre. No le gustaba nada más que luchar, y era conocido por su temperamento feroz y su naturaleza brutal. A menudo se le representaba como un joven, vestido con armadura, con una lanza o una espada en la mano.

Es bien conocido como el amante de Afrodita, que estaba casada con su hermano Hefesto, y aunque Ares desempeña un papel limitado en la literatura, cuando aparece en los mitos suele enfrentarse a la humillación.

Por ejemplo, una famosa historia de Ares y Afrodita los expone al ridículo de los dioses cuando su marido Hefesto los atrapa desnudos en una cama utilizando un ingenioso artilugio que fabricó. Ares tuvo varios hijos con Afrodita.

Hebe

Hebe era la hija de Zeus y Hera. Era la diosa de la juventud y la escanciadora de los dioses. A menudo se la representaba como una joven, con una jarra de néctar (la bebida de los dioses) en la mano.

Era una fiel servidora dedicada a la tarea que le habían asignado. Sin embargo, en algún momento fue expulsada del trabajo que tenía anteriormente. Perdió ese trabajo de una forma muy inusual cuando tropezó y se le desabrochó el vestido. Los demás dioses no se alegraron en absoluto de esto y decidieron quitarle su papel de escanciadora.

Hefesto

Hefesto era el hijo de Zeus y Hera. Era el dios del fuego, los herreros y los artesanos. A menudo se le representaba como un hombre barbudo, con una fragua y un martillo en la mano.

Hefesto fue expulsado del Olimpo por su propia madre porque lo encontró feo.

Hefesto era un ingeniero, pero también estaba atrapado en su propio taller porque era cojo y jorobado. Un día, se vengó de todos los que lo habían rechazado construyendo un trono mágico que atrapaba a quien se sentara en él. Hera, sin darse cuenta de las consecuencias de sus actos, picó el anzuelo y se sentó en el trono, sólo para quedar incapacitada por él.

Para liberar a su madre, exigió que la diosa Afrodita se convirtiera en su esposa. Afrodita era conocida por su atractivo y su capacidad para atraer a los hombres a su cama. Estaba casada con Hefesto, pero tuvo muchos escarceos con otros dioses y mortales, incluido su hermano Ares.