Bia: La diosa griega de la fuerza y el poder
La familia de Bia
Bia era una diosa griega que personificaba la fuerza y el poder. Era hija de los Titanes Palas y Estigia. Su padre, Palas, era el Titán de la batalla, mientras que su madre, Estigia, era la diosa del río Estigia. Bia tenía tres hermanos: Cratos, el dios de la fuerza, Niké, la diosa de la victoria, y Zelo, el dios del celo.
Bia y la Titanomaquia
Junto con su madre, Bia y sus hermanos ayudaron a Zeus en su guerra contra los Titanes. La guerra, que se conoció como la Titanomaquia, duró diez años, y los dioses olímpicos salieron victoriosos. Debido a sus heroicas acciones durante la guerra, los cuatro hermanos se ganaron el respeto de Zeus y se convirtieron en sus constantes compañeros. Casi siempre estaban a su lado mientras se sentaba en su trono en el Monte Olimpo, y se les encomendaba hacer cumplir las órdenes de Zeus cuando este requería un acto de fuerza.
Bia y Prometeo
Bia no es tan conocida como sus hermanos Cratos o Niké, y cuando aparece en los mitos, suele callar. Sin embargo, desempeña un papel fundamental en la historia de Prometeo. Prometeo era uno de los Titanes y a menudo estaba en conflicto con Zeus. Finalmente, enfureció tanto a Zeus que decidió castigarlo por toda la eternidad. Ordenó que Prometeo fuera encadenado a una roca en las montañas del Cáucaso. Bia y su hermano, Cratos, fueron enviados para llevar a cabo esta tarea, pero Bia fue la única lo suficientemente fuerte como para atar a Prometeo a la roca con las cadenas irrompibles.
Cada día, un águila arrancaba el hígado de Prometeo y se lo comía delante de él. Cada noche su hígado volvía a crecer, y el ciclo comenzaba de nuevo, dejándolo en un tormento perpetuo.