Dinlas: El dios griego del caos y el odio
Su origen y abandono
Dinlas es el dios griego del caos y el odio, hijo de Afrodita, la diosa del amor, y Ares, el dios de la guerra. Afrodita no estaba casada con Ares, por lo que Dinlas era ilegítimo. Afrodita se avergonzaba de él y lo abandonó, desterrándolo al inframundo.
Su adopción por Hades
Allí, Hades, el dios del mal y el engaño, descubrió a Dinlas tumbado en su frío suelo de piedra, sufriendo un gran dolor y tormento. Sintió una gran furia en Dinlas, debido a su abandono por su madre, y decidió adoptar al joven y convertirlo en un agente de la oscuridad.
Su misión en la ciudad de Lamark
A medida que Dinlas creció bajo la tutela de Hades, el dios malvado tuvo claro lo que debía hacer Dinlas. Hades lo envió de vuelta al reino humano para que sirviera como guardián de la ciudad de Lamark, un lugar mágico conocido por los guerreros de todo el mundo como un lugar donde podían venir a curarse después de la batalla. Había muchos médicos y enfermeras expertos en Lamark, algunos de los cuales fueron entrenados por el gran sanador, Asclepio, que era famoso por ser capaz de resucitar a los muertos.
Su destrucción de Lamark
Después de estar en Lamark durante un tiempo, Dinlas fue encontrado por su padre, Ares. Como dios de la guerra, Ares estaba naturalmente furioso de que existiera un lugar como Lamark, ya que quería que los guerreros se quedaran y perecieran en el campo de batalla cuando le placiera. No quería que desertaran de sus puestos.
Así que Ares le hizo promesas de gran riqueza y nuevas tierras a Dinlas si destruía la ciudad de Lamark. Dinlas se dejó persuadir fácilmente, debido a su gran sed de poder y a su profunda ira hacia todas las personas, especialmente hacia su madre. Aceptó destruir la ciudad como deseaba su padre.
Primero, regresó al Hades, donde el famoso perro de tres cabezas, Cerbero, había sido su mascota. Una criatura enorme y feroz, Cerbero tenía un punto débil por Dinlas, que siempre había sido amable con él. Cuando Dinlas le pidió que volviera a Lamark con él, Cerbero obedeció de inmediato, y juntos destruyeron la ciudad, matando a todos los que vivían allí y enviándolos a Hades para una eternidad de dolor y tormento. Asclepio, el gran sanador, fue asesinado por el propio Dinlas, como un favor especial a su padre, Ares.